<<Olga Bernad posee una voz personal. Es minuciosa, tiene capacidad para crear imágenes vigorosas e inesperadas. Su poesía posee clima y tensión, ritmo y evocación, aspira a la belleza, incluso a la terrible, se atreve a abordar temas dolorosos o exultantes con libertad. Demuestra una convicción absoluta en la fuerza de las palabras. Cree en la vida extrema del lenguaje. Siempre está en el camino, aunque haya estado la tormenta. Y es ahí, en pleno tránsito, donde la sorprende la inspiración>>.
Antón Castro.
<<He leído a Olga Bernad con una sensación de velocidad que atribuyo a su ritmo poderoso. Son versos inspirados sujetos a una música que se presume anterior a las palabras. Dan fe de esa ‘fatalidad’ de la poesía. Hay algo que decir. Y se dice>>.
Álvaro Valverde.