Los jaikus de Jesús Munárriz, que podemos llamar urbanos, reflejan con sencillez y precisión la atmósfera bulliciosa y cambiante de una gran ciudad. Sugieren un ameno paseo por Madrid, lleno de pequeños detalles asombrosos, imágenes que siendo cotidianas adquieren mucho significado al detenerte en ellas. Revelan un ojo atento y una mente sensible. Algunas son muy divertidas como su señoría perdiendo los papeles, o la duda ante si llueve o no llueve. Todo esta muy vivo, como la propia ciudad, y de vez en cuando se ilumina con esas flores que te salen al paso.
Susana Benet.